No
vamos a pretender que las presentadoras de la televisión dominicana
sean unas Bárbara Walters, la mítica comunicadora estadounidense de
"Today" y "The View", pero por lo menos deberían hacer un esfuerzo por
superar los convencionalismos y los criterios artesanales con que se
manejan algunas.
La gente con criterio queda insatisfecha con las entrevistas que algunas damas de la televisión criolla están haciendo.
Tienen
a veces formidables personajes como invitados en sus programas, que
pudieran dar hasta titulares en los periódicos con lo que dicen, pero
se quedan navegando en un mar de superficialidad y convencionalismos
baratos, con sus entrevistas chatarras de las que nunca sale nada bueno.
No ahondan, no escudriñan, se andan por las ramas, y por ello las entrevistas que hacen, se reducen a más de lo mismo.
Y quieren que uno se ponga a verlas...
No le veo gracia a llevar un invitado a un programa a repetir lo mismo que ya han dicho en otras entrevistas.
Si se emplearan más a fondo, pudieran lograr mejores resultados.
Aunque el problema a veces es de capacidad.
Aquí hay mujeres en la televisión que viven jugando “ping pong” entre ellas…
Una lleva a otra como invitada a su programa, y a la semana siguiente el proceso se da a la inversa.
“Yo te invito a mi programa, y luego tú me invitas al tuyo”.
Y así no puede ni debe ser.

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