Pétion-Ville, Haití.-El comercio de mercancías por la frontera de Dajabón-Ouanaminthe alcanza unos US$410 millones al año, señala un estudio elaborado por los investigadores dominicanos Juan del Rosario y Wagner Gomera.A simple vista, parecería que esas transacciones se hacen en el mercado formal, donde se registran US$251.54 millones. Mientras que el informal se estima en US$159.35 millones.
Sin embargo, el estudio revela que cuando a ese monto se le excluye el aporte de las zonas francas, el comercio formal sólo se cuantifica en US$64.58 millones.
De modo, que el gran grueso no se contabiliza oficialmente. “Esto indica que el 63 % del intercambio comercial en la frontera norte se produce en la informalidad”, explica.
Causa de la informalidad
Según el informe, los actores que realizan operaciones en la frontera establecen que pagan muchos impuestos en sus transacciones informales a diferentes agentes, con lo cual evitan someterse a los procedimientos aduaneros formales existentes .
Sin embargo, reconocen que estos “pagos” son elevados y se realizan de manera discrecional a miembros de entidades militares y civiles que controlan los pasos fronterizos en ambos lados.
Por eso recomiendan establecer mecanismos de cobros flexibles, pero regulados por las autoridades aduanales de ambos lados.
Tipo de mercancías
Las transacciones informales se verifican dentro y fuera de los días de mercado e implican todo tipo de mercancías, pero preponderantemente aquellas que son de origen agropecuario e industrial y textil.
En concreto, el 89 % de los productos agropecuarios que pasan por la frontera de Dajabón llegan de manera informal a la vecina nación, mientras el 71 % de los industriales se comercializan formalmente.
Entre los productos agropecuarios de mayor circulación están: yautía, yuca, ñame, papa, mapuey; vegetales, como auyama, tayota, berenjena, ajíes, vainitas repollo; granos como habichuela negra, habas, maíz, maní, millo, trigo.
Agrega, que en sentido general, las condiciones físicas en que operan los mercados fronterizos del país son deficientes.
Agrega, que en sentido general, las condiciones físicas en que operan los mercados fronterizos del país son deficientes.
No obstante, resalta que en el lado dominicano, las plazas presentan mejores condiciones que las de su pares haitianos, en donde no existe ningún tipo de infraestructura física mínima para alojar mercancía y personas.
Rosario y Gomera, profesores de la Universidad Acción Pro Educación y Cultura (Unapec), advierten que tanto en el lado haitiano como en el dominicano la ropa, calzados y alimentos que se comercializan están expuestos a la contaminación, por el mal manejo que se les da.
Seminario de la Obmec
La investigación fue presentada en el seminario “Comercio Bilateral”, celebrado en Haití por el Observatorio Binacional sobre Medio Ambiente, Migración, Educación y Comercio (Obmec).
El objetivo del encuentro es buscar soluciones al tema del intercambio comercial a través del aporte científico de profesores de universidades de Haití y República Dominicana, señaló la directora de la Obmec, Rachelle Charlier Doucet.
Durante el evento, el experto haitiano Raymont Lafontant, hizo una contextualización sobre la situación económica y el comercio bilateral de ambas naciones, enfatizando los altos y bajos de las relaciones comerciales.
Benedique Paul, profesor de la Universidad Quisqueya (UniQ), habló de la dinámica del comercio formal en la isla, y Jovis Bellot, profesor de la Universidad Notre Dame de Haití (UNDH), expuso sobre las barreras no arancelarias .
Por su lado, Vladimir Pimentel, profesor de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), tuvo a su cargo la presentación del estudio “Contextualización de las barreras y obstáculos al comercio bilateral”.
Líneas arancelarias
Los análisis de Pimentel dicen que República Dominicana contempla unas 7,048 líneas arancelarias, pero Haití apenas alcanza unas 5,285 .
En el caso dominicano, el 53.6 % de esas líneas se encuentran libres de arancel, en tanto, que para Haití es del 44.2 %.
De acuerdo a sus informaciones, ambos países duplican sus aranceles para productos agropecuarios frente a no agropecuarios, teniendo Haití tasas mucho más reducidas que las dominicanas.
Otros expertos y autoridades de la isla participaron en las conferencias.
Obmec: “Hay que hablar sin tabúes”
Los resultados de las investigaciones sobre comercio bilateral serán publicados por la Obmec para que sirvan de base al establecimiento de políticas públicas en ambas repúblicas.
En ese sentido, serán entregados a la Comisión Mixta Bilateral Dominico- Haitiano, dijo a EL DÍA Rachelle Doucet, directora de la organización.
“La participación en este evento demuestra que hay interés y voluntad de entenderse mejor”, dijo. A su juicio, ambos pueblos se han estado ignorando y funcionando a partir de prejuicios, presupuesto y falsas ideas.
“Lo importante es poder sentarse hablar y discutir incluso de los tabúes, que dejarán de ser tabúes si hacemos el esfuerzos”, indicó.
La Obmec está integrada por profesores de universidades de ambos lados y financiada por la Unión Europea con EU$900,000.
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