Los miembros de la realeza británica no pueden aprovechar sus viajes por el mundo para probar los más distintos y exquisitos platillos, al existir ciertas restricciones con las que cada uno de ellos debe cumplir.La revista 'Ok Magazine' dio a conocer que la Reina Elizabeth II es la encargada de supervisar todo lo que coman los miembros de la realeza durante sus viajes, pues por distintas razones deben evitar ingerir ciertos alimentos.
Entre los alimentos vetados para la realeza están los mariscos, la carne poco cocida o cruda, el agua de la llave, así como el ajo.
Los mariscos están prohibidos para evitar que sufran algún tipo de intoxicación, mientras que el veto al ajo se debe al olor que provoca en la boca y que podría significar una experiencia desagradable para las personas con las que tengan algún encuentro o comunicación.
Estos secretos fueron dados a conocer por la chef Carolyn Robb, quien por un tiempo considerable trabajó de tiempo completo en el Kensington Palace para Lady Di y el Príncipe Charles.
Otra tradición con la que deben cumplir es la de siempre viajar con un outfit oscuro en su equipaje, esto se debe para que puedan vestir de luto si es que fallece algún integrante de la realeza.
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